Capítulo 27.

-Ni peros ni nada-me dijo Lou secándome las lágrimas con sus dedos.

-Por  favor Lou, llévatela a la cafetería y así se despejará un poco-dijo Niall-no  os preocupéis, yo me quedo aquí por si acaso salen los médicos.

-No Niall, yo me quedo aquí-dije firmemente.

-Anda Ana, no te hagas de rogar, llevas aquí toda la noche sin dormir, lo menos que puedes hacer es ir a tomarte un simple café-dijo Lou.

-Bueno vale, pero no tardo nada-le dije  a Niall despidiéndome con un beso.

Llegamos a la cafetería, yo me tomé un simple café y Lou una Coca-cola.

-Bueno princesita, ¿ya has pensado alguna amiga tuya para mí?-me dijo Lou para que pudiese olvidar que estaba en un hospital.

-La verdad es que, pegas con Lara-dije con una tímida sonrisa.

-¿Lara? Bonito nombre, luego me la presentas.

-Tiene un problema. Es aún más fan de vosotros incluso que yo.

-¿Mas que tú? ¿Me estás diciendo que tú no eres fan?-dijo Lou haciendo como que se enfadaba.

-No seas tonto, con lo que yo os quiero a vosotros-dije dándole.

-¿Volvemos con Niall?-me preguntó Lou.

-Me parece perfecto, vamos.

Volvimos a la sala de espera, allí estaba Niall  sentado, con la cabeza  agachada, se percató de que estábamos allí, levantó la cara y pude ver como una lágrima se derramaba de sus ojos:

-Ana…-me dijo cabizbajo.

-No, Niall, no…me prometiste que no le pasaría nada-le dije llorando.

-Yo… lo siento-me dijo.

Salí corriendo de aquel lugar en dirección a la calle, no quería ver a nadie, ni a Lou ni a Niall, solo quería volver a ver a mi madre viva y eso no podía ser. Corrí y corrí, sin saber a dónde iba. Cuando me faltaba el aliento me senté en el bordillo de una casa con la cabeza agachada: acababa de perder a mi madre.